martes, 5 de octubre de 2010

En la noche infinita


Munch

Lagrimas que danzan en el infinito de mi noche
ojos que no ven más claridad que el vacío que existe.

Descansen, solo descansen...
cuando no se puede estar más flácido.

Intento, entrar a este paraíso de la calma
de aguas café y nubes de humo

Lunas que elegir

Jode la carne
me jode la masa encefálica

Hay letras que vuelan, letras que vomito con margaritas, palabras que sudo en sueños húmedos, palabras que jalo con mi cabello enajenado, palabras que desgarran mi vida con su paso fugaz.

Veo todo
veo caras y cuevas en ellas
veo figuras,! Tantas! que me echo en ellas buscando alguna qué no exista,
soy parte de ellas
porque soy parte de la nada

la nada inexplicable...

Espero en la orilla al barquero qué no llega...
soportando mareas asesinas que salan mi piel,
bebo de sus aguas,
aunque no quiera la garganta se ha cansado solo de la sal mis lagrimas

Tengo, el fuego en los ojos que ningún Prometeo robó
fuego transparente, fuego vidrioso
que no quema lo que mi carne enfría.

Después de todo estoy aquí
Como esa roca
como la otra roca al otro lado de la acera

como el poste de alumbrado publico

estoy y no estoy.

1 comentario:

  1. Guido,
    Perdona por haber estado tan ausente, me duele leer esos versos. No es tan mal, pero hay mucha tristeza y dolor ahí. Yo no te conocí así y a veces me da corja pensar que desde que me conociste escuchaste y viste todo eso. Aún se pueden reparar cosas, ya no pienses en eso, solo sigue de frente haciendo lo que te gusta y sabes.

    En el último post me despido, no te incluí en mi lista porque contigo será personal.
    Un beso

    K-M-

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