martes, 17 de agosto de 2010

Mentes Inocentes

No sè quien la pinto pero me gusto para este post.


tal vez la razón de la que tanto me quejaba se este yendo al fin,
y yo acepte la mente desentendida de la que tan orgulloso andaba
como se puede llegar a odiar tanto la grotesca curvatura de unos labios
sin no imaginar las mas macabras y crueles delicias de un yo permisivo,
contarlas sin sentencia bajo un seudónimo libertino
creo no tendrá tanta repercusión, y si la tiene me importa un carajo

Quien no ha pensado en escribir en pieles su nombre
con una delicada hoja metálica, ver correr una fina, finísima gota carmín
con movimientos suaves y armónicos recorriendo una extremidad
y cayendo inevitablemente al suelo
quien me va a sentenciar?
no se ha excitado usted alguna vez, cuando imaginaba tener en sus palmas
una pupila, tener el control sobre ella
estrujar lentamente sus falanges
y sentir sus fluidos escaparse entre tus dedos cubiertos de mugre
dígame, es sabroso? y rinde beneplacìa a la enfermiza mente humana
lo más seguro es que al dar la última tecleada
me cause pavor leer estos versos
pero mira! tengo los ojos saltones y la mano presurosa
palabras en cola e ideas por salir

Aros metálicos, delgados aros recién fundidos
yace ella sentada vestida de blanco
los aros tienen un mecanismo permitiéndoles abrirse y cerrarse a voluntad del operador
perforando así todo lo que ponga en medio antes de ser cerrado,
mira a una esquina de la vieja choza de madera
el operador se acerca
prueba su invento
ella parece no percatarse de que él se acerca
está a cortos pasos de ella
sus manos tiritan
de excitación, tiene el sexo erguido y en el rostro una sonrisa inocente y
como disfruta acercarse, su sudor se hace charco en el suelo desnivelado
ya esta frente a ella
con dos de los aros en la mano
ella lo mira inexpresiva y alza la cabeza como resiganada a su suerte
tiene la piel morena y los cabellos negros, numerosos rollos grasientos sobresalían de su abdomen que

el vestido no lograba disimular=

Tenía las manos sobre las rodillas
estaba callada
el continuaba, se detuvo unos instantes
a idear nuevas ideas, nuevos proyectos
¡arte puro! pensaba el
imaginaba aquellas protuberancias de grasa amarillenta
derretirse bajo la luz de un cirio
dejando caer suculento exilir
pero no, era preciso cumplir estrictamente solo lo que se había encomendado a hacer
giro los ojos hacia ella
contemplándola, tan vulnerable

1 comentario:

  1. Querido mío,
    te has emburjado por algo más profundo. Tus versos me sobresaltaron. La obscenidad, lo crudo, lo abzurdo, la belleza fea, ¿pero qué es feo? recuerda que todo es por convención, y te felicito. Rompe los parámetros y ando con conciencia por el camino de las palabras... sé que puedes.

    Un beso.

    K-M-

    ResponderEliminar